"Póngale la mano en el anca ahora: eso lo mantiene tranquilo... suba."
(en escena un padre y su hijo)
...Cuando en aquellos momentos el chico, ya en su tenida de huasa – súmeles y espuelas, chamantos de labores y bonetes abatanados y con arabescos de seda en siete matices- fue a treparse de un salto sobre su mampato, el padre lo detuvo:
-Se sube despacio. Ya se lo he dicho. Bájese. Suba de nuevo…no te voy a dejar salir más con Segundo. Se encaraman en cualquier pingo viejo por ahí como pumas, y salen como disparados.
-Bien, papá.
-A ver. Primero, dé una vuelta alrededor del caballo. Revise su apero. Así. Póngale la mano en el anca ahora: eso lo mantiene tranquilo, suba. Despacio…despacito…no se parte altiro. Sentarse bien, esperar un rato con la bestia quieta: así el animal no se pondrá nunca nervioso.
("Gran Señor y Rajadiablos" (1948)-Eduardo Barrios)
Publicado por: Francisca Cifuentes.
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